Aprovecha las ventajas de ambas opciones

Cambiar las dos bañeras por platos de ducha. Esta es una de las primeras obras a las que se enfrentan quienes adquieren una vivienda, ya sea para uso habitual o vacacional.

Las múltiples ventajas que ofrecen los platos de ducha, sobre todo los modelos más modernos, son indiscutibles. Basta con visitar a especialistas en espacios de baños para comprobarlo de primera mano.

Los beneficios tener un plato de ducha son indiscutibles

Si pensamos en nuestra vida cotidiana, las ventajas de los platos de ducha son incuestionables:

• Permiten total accesibilidad, incluso en silla de ruedas, pues se pueden colocar a cota cero.
• No resbalan.
• Resultan más fáciles de limpiar.
• La variedad de modelos y revestimientos ofrece tantas alternativas como gustos decorativos.
• Se adaptan perfectamente al espacio disponible.
• Pueden incorporar cabinas o columnas de hidromasaje.
• Suman amplitud al baño, en especial si optamos por una mampara totalmente transparente.
• Ofrecen un plus de belleza y sofisticación.
• Nos ayudan a limitar nuestro gasto de agua en la ducha, pues un baño precisa de muchos más litros de agua que una ducha rápida.

Visto lo visto, ¿quién no eliminaría las dos bañeras de la nueva casa para sustituirlas por sendos platos de ducha?

Ahora bien, teniendo la suerte de contar con dos baños, deberíamos pensar en la posibilidad de mantener una de las bañeras.

¿Por qué? La vida cambia. Te lo contamos.

Las razones por las que una bañera en casa puede encantarte

Existen muchos pros y contras sobre instalar una bañera, pero detente a pensar un minuto. Sin embargo, leer un libro mientras estamos sumergidos en un baño de espuma o sales. Podría parecer una razón menor, pero cuando nos enfrentamos a puestos de trabajo y tareas especialmente estresantes o cansadas, ese baño puede ser nuestra salvación al final del día.

Y ¿qué ocurre cundo se tiene hijos e hijas? Quienes sois padres y madres sabéis a qué nos referimos. Dejarlos disfrutar a remojo durante media hora en hacer un paréntesis de tranquilidad en el día a día de una familia. ¡Que se lo digan a quienes han pasado el confinamiento con niños en casa, bendita bañera!

Solo por estas dos razones, nuestro consejo es que si dispones de dos baños, dejes la bañera en uno de ellos. Al menos durante unos años, pues siempre podrás encontrar el momento para cambiar tu bañera por una ducha.

Nunca se sabe cómo van a evolucionar nuestras necesidades, así que lo mejor es barajar todas las opciones.