Cómo mantener siempre tu mampara limpia ¡sin esfuerzo!
Mantener tu mampara como el primer día
Limpiar la mampara es muy sencillo. Normalmente con una bayeta húmeda basta. Sin embargo, hay veces que la acumulación de cal o de restos de jabón nos plantea un problema al que no logramos dar solución con un método tan simple.
En ocasiones se debe al tipo de agua (en ciertas ciudades o municipios esta es muy dura y deja restos rugosos en el cristal), otras, a que no tenemos tiempo de limpiar la mampara a menudo para evitar manchas de gel y champú, el caso es que hay veces en que el cristal y la perfilería presentan un estado poco higiénico y desagradable. Pero no te agobies demasiado, no hace falta que pases la tarde con los guantes de limpieza enfundados nosotros te damos la solución.
Las cuatro recomendaciones estrella
- Empieza bien, adquiere una mampara con tratamiento contra la cal y las manchas, tendrás buena parte del trabajo hecho. El cristal de estas mamparas cuenta con un tratamiento de fábrica que minimiza la adherencia de sustancias indeseadas y facilita que la hoja se vea siempre limpia.
- Si ya no estás a tiempo porque cuentas con una mampara convencional, hazte con una espátula limpia-cristales. No ocupan espacio, así que puedes guardarla junto al resto de tus productos de higiene dentro de la bañera o plato de ducha. Tan solo tendrás que pasarla después de cada baño. Un gesto sencillo, que a los niños les encanta realizar, y que mantendrá tu mampara limpia por más tiempo.
- Los productos caseros y naturales pueden facilitarte la vida y evitar que corras riesgos innecesarios si tienes bebés en casa. El vinagre y el limón, incluso el bicarbonato, mezclados con agua caliente, no solo limpian sino que desinfectan. Tan solo tendrás que aplicarlos con una esponja frotando suavemente, dejarlos actuar unos minutos y aclarar después.
- Cuidado con los productos muy abrasivos y con los estropajos, no solo pueden estropear el cristal al arañarlo sino que pueden deteriorar seriamente el esmalte y color de los perfiles, además del plato de ducha o la bañera si el producto entrase en contacto con estas. Recuerda que también es peligroso mezclar diferentes productos de limpieza, ya que algunos, como el detergente y el amoniaco, son incompatibles y podrían causarte una intoxicación.
Como ves, es sencillo mantener la suciedad en tu mampara a raya. Y también en las juntas, para lo cual podrás usar un pequeño cepillo que te permita alcanzar zonas más inaccesibles. Ahora que has descubierto lo fácil que puede ser el mantenimiento de tu mampara si tu duda es qué mampara elegir, hace un tiempo desicamos una entrada del blog que te ayudará.
- Posted by Laguardia y Moreira
- On 07/09/2020