Elegir el suelo de cocina adecuado no es sencillo. Todo depende del uso que vayamos a dar al espacio y de las necesidades específicas del lugar. Al igual que al elegir el suelo del baño, elegir el suelo de la cocina es algo que debe pensarse y mucho.

No hay que olvidar que la cocina es un área de alto tránsito dentro de la vivienda, cuyo suelo es propenso a golpes, derrames, etc. Por esa razón, no solo debemos optar por un acabado que disimule la suciedad, sino que sea fácil de higienizar, súper resistente, agradable al tacto y que se adapte a tu estilo de vida. Y a la estética de tu cocina o del resto de la estancia, si está abierta, por ejemplo, al salón o al comedor.

Aquí van algunas opciones para elegir el suelo de cocina perfecto, aunque si sigues con dudas, siempre puedes consultar a nuestro equipo experto en suelos y revestimientos de cocina.

Suelos de cocina para todo trote: cocinas de uso intensivo para familias con niños o mascotas

Si buscas elegir suelo de cocina para un espacio que soporta mucho tráfico, el material recomendado en este caso es el porcelánico o cerámico esmaltado. Goza de una alta robustez, por lo tanto, es muy duradero y resistente a impactos, arañazos, humedad y manchas. También frente a agresiones externas como pequeñas piedras o tierra introducidas en las suelas de los zapatos, especialmente en zonas rurales. Además, es fácil de limpiar y mantener, con apenas agua y detergente específico.  

Otra ventaja es que está disponible en una gran variedad de acabados, incluyendo imitaciones de madera o piedra, y que su precio es asequible. Aunque también podrías optar por una opción más barata y también duradera como el suelo vinílico resistente al agua. 

Este último se presenta más confortable al tacto, más cálido, y puede imitar, igualmente, el diseño de la madera o la cerámica. Otra gran ventaja es que puede colocarse sobre el antiguo suelo de forma muy sencilla. Eso sí, tendrás que sopesar su idoneidad en el caso de contar con un sistema de calefacción radiante.  

Las baldosas de gres porcelánico antideslizante son otra buena opción si los derrames están asegurados o contamos con cocinas abiertas o semiabiertas a espacios exteriores. Ya que en zonas húmedas, no se deforma ni absorbe agua, y evita resbalones gracias a su superficie texturizada.

Cocinas con tránsito parcial: para quienes solo van a casa a cenar y viven de manera autónoma o en pareja

Para quienes necesitan elegir suelo de cocina en hogares con menor uso, como parejas o personas que solo cocinan por la noche, los materiales naturales como piedra (granito, pizarra o mármol tratado) son ideales. Estos ofrecen elegancia y durabilidad, aunque pueden requerir mantenimiento..

De hecho, existe una alternativa más económica, que es la del hormigón pulido, más resistente a impactos, aunque también puede necesitar de sellado para evitar manchas.  Este material ofrece ventajas estilísticas, ya que ofrece una estética muy homogénea, minimalista e industrial.  

Si se prioriza la estética y el diseño, y no se va a hacer un uso intensivo de la cocina, el microcemento, tan moderno y continuo, se adaptará perfectamente a los requerimientos deseados, gracias a esa superficie lisa, sin juntas, que puede adoptar una gran variedad de colores.  

Los azulejos hidráulicos, sean de imitación o artesanales, son duraderos y altamente decorativos, añadiendo un plus de personalidad a la cocina con patrones únicos. Pueden utilizarse para toda la cocina o solo para ciertas partes, por ejemplo, bajo la mesa y sillas en la zona de comedor.

Suelos de cocina para uso ocasional

Si buscas elegir suelo de cocina para segundas residencias o cocinas de uso ocasional, la madera maciza tratada o el parquet laminado son opciones ideales. Aunque más delicados, estos suelos añaden calidez y un estilo acogedor. Con el cuidado adecuado, pueden ser duraderos y ecológicos, perfectos para ambientes con poco uso intensivo.

Cada opción ofrece ventajas únicas para diferentes necesidades. Piensa en tu estilo de vida y el uso que le das a la cocina para acertar en la elección del suelo perfecto.

Otros consejos que podemos darte a la hora de elegir el suelo de cocina es que tengas en cuenta estos cuatro aspectos a la hora de elegir el material del suelo de tu cocina:

1. El tamaño de la cocina, de cara al presupuesto del que dispongas y al efecto visual que deseas conseguir con el suelo.  
2. La necesidad de apostar por acabados antideslizantes para evitar accidentes.
3. Si es preciso realizar mantenimiento y el coste del mismo.
4. Su compatibilidad con determinados sistemas de calefacción como el suelo radiante.

Elegir el suelo de cocina adecuado hará que tu cocina sea funcional, segura y visualmente atractiva según tus necesidades. Si todo esto te ha generado dudas y todavía no sabes qué suelo elegir para tu cocina, ¿hablamos?